Cuando se decora y sobretodo las paredes del living, lo fundamental es que ellas reflejen la personalidad de las personas que viven allí. Si se quiere dar un aspecto más amplio, se puede pintar las paredes con colores claros, con acabados brillantes y lisos. Si por el contrario se pretende algo más acogedor, los colores más oscuros y las texturas rugosas son las mejores.
Los cuadros amplios con marcos acordes para decorar paredes living, y al color de las paredes dan un toque de distinción al lugar. Para renovar el ambiente, lo mejor es colocar papel pintado o tapiz, las pegatinas también dan un sello personal al lugar. Si ya se tienen los muebles hay que adaptar el color de las paredes, al estilo de la decoración que ya se posee, otra cosa es cuando se va a empezar todo de cero. Las paredes blancas, se pueden llenar de colores con los colores de muebles, cojines, etc. Para crear un ambiente alegre y lleno de vida, se puede hacer una combinación de paredes de distintos colores, blanco, rosa, celeste, y que los muebles sigan una línea similar. Los contrastes a veces quedan bien, pero hay que tener mucho cuidado. Si las paredes son grandes y están desnudas, se las puede cortar con un mueble, que la divida, o se puede poner un mueble bajo de no más de 1 metro de alto y que sea largo, así se le puede poner un gran florero o jarrón, con un lindo arreglo floral, con flores naturales y algunas hojas muy verdes, hacia allí se le puede hacer llegar un haz de luz. No se aconseja poner frutas, porque es una decoración de comedor, o de cocina.