Aunque no seamos diseñadores de interiores no hay duda que con un poco de idea e imaginación es perfectamente posible hacer algunos cambios decorativos en casa, y disfrutar así de una apariencia completamente renovada y, sobre todo, tan diferente como innovadora. Pero para conseguirlo es necesario contar con algunos ejemplos útiles. Una opción excelente a la hora de optar por cambiar el diseño de nuestra casa es optar por los separadores de ambientes. ¿No sabes qué son, para qué pueden servir y cuáles son sus increíbles ventajas? Te hablamos sobre todo ello, y también te proporcionamos algunas ideas bonitas lo largo del presente artículo. Toma nota.
Un separador de ambientes puede proporcionar cierta privacidad en un espacio pequeño, dividiendo en diferentes áreas un cuarto o estancia de pequeño tamaño, o bien definir nuevas áreas en un espacio mucho más grande y abierto.
No hay duda que una de las principales ventajas del separador de ambientes es su sencillez y simpleza, porque no es necesario tener que construir una pared para poder dividir nuestro espacio en función de nuestros gustos personales. Además, su instalación es tan sencilla como fácil, de manera que, en realidad, tan solo se necesita o se requiere de un poco de imaginación.
De hecho, los separadores de espacio son tremendamente prácticos y útiles, sobre todo en aquellos espacios en los que deseamos conseguir cierta flexibilidad. O, lo que es lo mismo, es posible disfrutar de un plano de planta abierto y poder tener privacidad al mismo tiempo cuando utilizamos un divisor de habitación para separar así ocasionalmente una sección particular del espacio del resto de las funciones.
Es muy útil, por tanto, para cuando el espacio en nuestra casa es muy limitado, o cuando simplemente deseamos mantenernos alejados de paredes sólidas y permanentes que, a fin de cuentas, solo terminarán por limitar nuestras opciones.
Lo cierto es que existen muchas formas distintas en las que es posible usar un divisor de pared, y también muchos tipos y estilos diferentes para escoger. Por ejemplo, podríamos utilizar un divisor o separador de ambiente para definir un espacio a modo de vestíbulo, o incluso nuestra propia área de trabajo. Así, si nuestra puerta de entrada a casa se abre directamente a la sala de estar, es posible crear nuestro propio vestíbulo de entrada utilizando separadores.
Además, podemos usarlos para delinear un espacio pequeño que, por ejemplo, deseemos utilizar como si se tratara de una auténtica oficina en casa, pero sin tener la obligación de dedicar una habitación o un cuarto completamente para esta función.
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Algunas ideas útiles de separadores de ambiente
Una cortina divisora
No todos los separadores de habitaciones tienen por qué ser necesariamente pantallas plegables. Podemos, por ejemplo, intentar ser astutos y colgar una cortina en ese rincón de la oficina donde deseemos dividir el ambiente.
En esta ocasión nos encontramos con una cortina de color blanco que se ha utilizado para dividir el espacio de la cama del resto del cuarto, que como vemos, funciona a modo de oficina.
Crear una entrada
Si nuestra puerta principal se abre directamente a la sala de estar, es posible que cada vez que abramos la puerta quien haya tocado en la puerta termine por ver el resto de la casa. Esto, obviamente, puede ser muy negativo e incómodo.
Si el espacio lo permite, podemos crear una pantalla de entrada improvisada con una pantalla plegable que sea lo suficientemente alta como para que cubra desde el suelo hasta el techo. Además, para generar cierta textura, es posible optar por separadores con texturas y cierto diseño, por ejemplo a modo de collage.
Útil para animar un rincón vacío
Un divisor no solo puede ser utilizado para separar el ambiente. Si es bonito y dispone de un diseño tan cuidado como elegante, es posible utilizarlo únicamente a modo decorativo, sin que tengamos la necesidad de separar zonas.
Por ejemplo, las pantallas plegables, en especial las más antiguas, tienden a presumir de intrincados diseños y elementos únicos a modo de texturas. Por tanto, pueden servir incluso como si de esculturas u obras de arte se tratara.
Auténtico arte flotante
Si te apasiona el arte puedes optar por suspender una pintura flotante, lo que te permitirá conseguir un resultado aún más bonito y atractivo si cabe. Y, además, se crea un espacio sumamente bonito y diferente, ya que sustituimos nuestro divisor plegable por una pintura que nos guste.
